Qué mejor escenario que una institución pública y administrativa para mostrar un Medellín 2030… para cuando tengamos que empezar de nuevo a hacer ciudad, la Medellín soñada (si es que existe) en la que todos participemos y quepamos, en la que los arquitectos no sean politiqueros o políticos y en donde se logre una identidad con nuestra geografía y entre nosotros mismo.
Sería interesante para todos (tanto para nosotros como para los que leen este blog –sí es que lo leen-) que dejen un comentario dando una opinión de lo que sería el Medellín (post-apocalíptico) del 2030.
Las imágenes son de Juliana Montoya (¿?) que nos la cedió hace algunos meses atrás…
1 comentarios:
Hola, disculpad pienso utilizar una de tus imágenes para la portada de un libro con plena autorización suya. Gracias por su compresión
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